El herpes es uno de los virus más temidos del mundo, y por una buena razón. Aunque una infección de herpes rara vez pone en peligro la vida, puede causar vergüenza y poner en riesgo a sus seres queridos. Sin embargo, cuanto más sepa sobre el virus, más podrá evitar una infección, o controlarla y seguir viviendo una vida plena. Aquí hay siete datos sobre el herpes que pueden ayudar a desmitificar esta enfermedad mal entendida.

Hay dos tipos principales de infecciones por herpes

La gran mayoría de las infecciones de herpes en humanos son causadas por dos tipos de virus: El virus del herpes simple (HSV) 1 y 2. También conocido como herpes oral, una infección por HSV-1 generalmente produce ampollas conocidas como herpes labial alrededor de la boca. El herpes genital es causado por una infección por HSV-2 y generalmente provoca ampollas o lesiones en o alrededor del área genital.

Dos de cada tres personas están infectadas con herpes

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que, a nivel mundial, alrededor del 67% de la población humana está infectada con HSV-1. La OMS también estima que alrededor del 13% de las personas en todo el mundo están infectadas con HSV-2. El virus se propaga a través del contacto físico cercano, lo que significa que algunas personas se infectan al nacer.

No hay cura para el herpes

Desafortunadamente, no existe una cura para una infección por herpes. Una vez que está infectado con el virus, corre el riesgo de transmitirlo a otras personas por el resto de su vida. Dada la prevalencia del herpes y la falta de una cura, es importante que cualquier persona en riesgo de infección se haga pruebas periódicas para detectar el virus.

Puede estar infectada con herpes y no saberlo

Desafortunadamente, es posible que el herpes infecte a alguien sin que lo sepa. Si bien una infección por herpes generalmente produce llagas alrededor de la boca o del área genital, algunas infecciones son asintomáticas o solo causan síntomas leves. Esto facilita que las personas infectadas con herpes propaguen involuntariamente la enfermedad a otras personas. La única forma de saber si tienes herpes es haciéndote la prueba.

El herpes se propaga de persona a persona

Contrariamente a la creencia popular, el herpes se contagia a través del contacto físico cercano con una persona infectada, no al tocar objetos que ella también haya tocado. El herpes no se puede propagar a través de los asientos del inodoro, la ropa de cama u otros objetos con los que una persona infectada pueda entrar en contacto.

Un brote de herpes (por lo general) lleva a otro

Los brotes de herpes pueden ser dolorosos y vergonzosos. Desafortunadamente, los brotes recurrentes de herpes son comunes. Aquellos infectados con HSV-1 pueden esperar otro brote dentro de un año después del primero. Aquellos con HSV-2 típicamente experimentan de cuatro a cinco brotes dentro del primer año.

Cualquiera puede tener herpes

El herpes no es solo una enfermedad para los promiscuos. Todo lo que se necesita para sufrir una infección de herpes es una exposición al virus.

La importancia de las pruebas de herpes

Dada la facilidad con la que se puede propagar el herpes y las consecuencias de por vida que puede significar para las personas infectadas, es importante hacerse pruebas periódicas para detectar la enfermedad. Cuanto más sepa sobre su estado de salud, más seguro podrá estar en las decisiones de su vida. Con las pruebas periódicas del herpes, no solo se protegerá a sí mismo de la enfermedad, sino también a sus seres queridos.

Fuentes

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