Preservativos femeninos: ¿qué son y cómo benefician a las mujeres?

El preservativo más popular y accesible es el preservativo masculino (externo). Sin embargo, también existen preservativos femeninos, aunque no son tan conocidos como los masculinos. ¿Qué eficacia tienen los preservativos femeninos y cuáles son sus ventajas?

¿Qué son los preservativos femeninos?

Los preservativos femeninos son dispositivos anticonceptivos que funcionan como barrera para evitar que el esperma entre en el útero. El objetivo es prevenir el embarazo y las infecciones de transmisión sexual (ITS).

Se diferencian de los preservativos tradicionales porque se colocan en el canal vaginal, a diferencia de la barrera que se coloca fuera de la vagina para el sexo oral. Los preservativos femeninos están fabricados con poliuretano, una sustancia fina y blanda que a veces también se utiliza para fabricar preservativos masculinos.

¿Cuál es la eficacia de los preservativos femeninos?

Con un uso correcto, los preservativos femeninos son casi tan eficaces para prevenir el embarazo como los masculinos, con un porcentaje de éxito de alrededor del 95%. Esto implica que 5 de cada 100 mujeres que los usan correctamente se quedarán embarazadas en un año. En comparación con el masculino en el que, sólo 2 de cada 100 mujeres que utilicen correctamente los preservativos masculinos se quedarán embarazadas en un año [1].

Aunque muchos pueden considerar el preservativo femenino como un método anticonceptivo no válido, las estadísticas ponen de manifiesto que el preservativo femenino sigue siendo muy eficaz.

¿Cuáles son las ventajas del preservativo femenino?

Tomar o no un anticonceptivo, y el método por el que se opte, es una decisión totalmente personal. Algunas mujeres y parejas pueden preferir los preservativos femeninos a los masculinos por las siguientes razones:

• Tienes hasta 8 horas antes del coito para ponerte un preservativo femenino, lo que puede ayudar a evitar que se “interrumpa el ambiente”, a diferencia de los preservativos masculinos.
• Puedes tomar el control de tu propia salud sexual, especialmente si tu pareja no quiere usar un preservativo masculino
• No está hecho de látex, que puede irritar la piel
• No es imprescindible quitárselo directamente después del coito
• Puede colocarse en cualquier momento, a diferencia del preservativo masculino, que requiere una erección
• No requiere prescripción ni ajuste

¿Cuáles son las desventajas de los preservativos femeninos?

Los preservativos femeninos no son para todo el mundo. Algunas de las críticas que se hacen a los métodos anticonceptivos alternativos, incluidos los preservativos masculinos, también son aplicables a los preservativos femeninos. Las desventajas son:

• Puede salirse de su sitio durante el coito
• Puede irritar tu piel o la de tu pareja
• Puede hacer que las relaciones sexuales sean menos intensas
• No es tan eficaz como los preservativos masculinos para prevenir las ITS y el embarazo
• Suele ser más caro que los preservativos masculinos
• Sólo hay un tamaño para elegir

Sin embargo, lo anterior no tiene por qué desanimarte a probar los preservativos femeninos como alternativa a tu anticonceptivo habitual. Si estás interesada en descubrir en qué consisten los preservativos femeninos, ¿por qué no lo descubres por ti misma?

Fuentes

[1] WebMD: Preservativos femeninos